Todo en la Creación es vibración, todo en la Creación es energía que vibra a una determinada frecuencia. Esto es algo conocido por los interesados en el hermetismo y otros conocimientos esotéricos incluidos en muchas religiones y filosofías. A pesar de ello, es algo bastante desconocido y, sobre todo, poco asumido. Banalizado y desvirtuado como tantas otras cosas en esta sociedad de la inmediatez y la superficialidad, a la mayoría de la gente lo único que le ha llegado de esta grandiosa verdad es lo de transmitir las "buenas vibraciones" y "malas vibraciones" que influyen de alguna manera casi mágica en los demás.
Lo material y lo espiritual, lo humano y lo divino, los malos y buenos sentimientos desde el miedo al amor... todo son distintas frecuencias, desde las bajas hasta las más altas. Y explica en gran medida la realidad de nosotros mismos, de nuestro mundo, del universo, de Dios...
A continuación, el documental "Ilusión y realidad", que trata este tema y sus formidables consecuencias, acercando de una forma magnífica lo espiritual y lo científico. Nunca la humanidad tendría que haber separado la religión y la ciencia, quizás es ahora el momento de volver a la unidad del conocimiento, ahora que estamos viviendo una época de cambios, una época que parece anunciar un cambio trascendental de la humanidad. Un documental para ver con tranquilidad y atención más de una vez. Viéndolo nos acordamos de los grandes maestros espirituales... todo vibra con la voz de lo divino... y la mejor de las vibraciones es la del amor.
En verdad que nunca debieron separar ciencia y religión y eso me ha llevado a una reflexión a colación de una película que vi recientemente "Ágora" de Amenabar que ilustra bien lo que quiero decir. En ella observamos que empieza a contemplarse la teoría heliocéntrica, considerada un disparate por entoncés y el movimiento elíptico de la tierra, observamos que estas teorías se enfrentan contra la naciente iglesia cristiana y por tanto, todo aquel que defiende tal idea es considerado un hereje. Pues bien, la religión no es más que la traducción de la ciencia, o lo que es lo mismo, religión es ciencia y ciencia es religión, pues las cosas suceden pero hay dos formas de explicarlas, una es propia de estudiosos y la otra viene a decir lo mismo pero con imágenes y nombres de dioses (permitidme ser simplista para no complicar más la explicación). Pero olvidamos que la religión que explica esa ciencia se ve limitada por los mismos límites de la propia ciencia, de modo que, si se ignora que es el sol el centro y la tierra gira alrededor, eso se reflejará también en la religión. Con el tiempo y el estudio, así como al amparo de nuevas técnologías se descubren cosas nuevas, se corrigen errores ¿en qué momento la religión y la ciencia se separan? en el momento en que la ciencia está dispuesta a derribar sus propios mitos, plantearse la posibilidad de estar equivocados mientras la religión no "Hipatia, la filósofa, se plantea en un momento si está equivocada sobre una teoría y eso la lleva a seguir indagando hasta que da en el clavo con la rotación elíptica de la tierra y no para de insistir hasta hallar una explicación, lo que pone en jaque los propios conocimientos científicos que había aprendido de grandes pensadores antes que ella". Pero también la ciencia o, mejor dicho, muchos científicos se muestran tan obstusos como el mayor fanático religioso ¡exacto, lo habéis pillado! ergo, la ciencia y la religión no se diferencian tanto. En un momento de la película, uno de los parabolanos (cristianos) se pregunta "¡y si estuviéramos equivocados!" cuando observa las matanzas que realizan contra los infieles pues Jesús perdonaba, él mismo (el joven cristiano que había sido esclavo de Hipatia) fue perdonado por ella y en cambio él no era capaz de perdonar, pero tiene la decencia de planteárselo, en cambio le contestan una mamarrachada propia más de la sobervia humana que de la sabiduría y que del propio Cristianismo. Entoncés la clave no está en ciencia sí, religión no o ciencia= razón, religión= fé (sin razonar). Cualquiera de las dos opciones es igual de radical y equivocada porque sería como una paella que necesita del arroz y del marisco sin poder prescindir de ninguno porque si no no sería paella.
ResponderEliminarGracias por tu interesante comentario. La ciencia y la religión, siempre unidas en las antigua civilizaciones conocidas, empezaron a separarse definitivamente cuando ambas por orgullo, soberbia y desconocimiento empezaron a no comprenderse mutuamente y creerse versiones contrarias de la realidad. En el gnosticismo y el hermetismo (muy relacionados) eso no ocurre, pues la búsqueda del conocimiento está por encima de todo, y tras milenios y desde hace milenios mantienen la misma postura: el conocimiento, la ciencia (la de verdad, no la inmovilista oficial de ahora) lleva a la comprensión de lo espiritual y, por tanto, de Dios.
ResponderEliminarEs muy interesante lo que dices Jose, porque esa es la base de la masonería, el eje central de la masonería es el "conocimiento", la "razón", de hecho se dice que una de las traducciones de la G que la escuadra y el compás enmarcan, es la de Gnosis. El propio símbolo de la estrella de flamígera de 5 puntas, representa el conocimiento humano. Sólo con un perfecto conocimiento de uno mismo se puede llegar al conocimiento divino.La masonería propone una forma, no es la única, por supuesto.
ResponderEliminarSolo quisiera agregar una puntualización sobre ese conocimiento gnóstico. Al principio puede ser intelectual, la razón, pero en cuanto se toma conciencia de la realidad de lo humano y de lo espiritual ese conocimiento debe ser ya intuitivo y lo que se llama iluminación, porque solo así se llega de verdad a lo más elevado, porque la razón es limitada y solo funciona en el mundo sensible o material.
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