lunes, 11 de enero de 2010

LA GRAN PIRÁMIDE DE GIZA, POR FERNANDO JIMÉNEZ DEL OSO

La Gran Pirámide de Giza, Egipto, es uno de los grandes misterios de la Humanidad. Acompañada de otras dos que no hacen sino acrecentar el enorme enigma, es el monumento más impresionante jamás construido y eso que ya tiene casi 5.000 años... pero esa edad es lo oficial, como su construcción con técnicas y obreros que dan risa en cuanto se conocen las enormes dificultades arquitectónicas que supone y la exacta orientación y disposición que posee junto a sus compañeras. Hasta su nombre oficial, Pirámide de Keops, por ser este faraón el que supuestamente mandó hacerla, es simple especulación de la egiptología oficial basada en unas muy débiles pruebas.
El Dr. Fernando Jiménez del Oso, al que tanto echamos de menos los amantes del misterio, en colaboración con Manuel José Delgado, eminente piramidólogo heterodoxo, nos dejó un magnífico documental sobre este tema en el que pone en serios aprietos la versión de la arqueología oficial sobre la construcción de la Gran Pirámide de Giza. Hoy en día, con la tecnología y los medios que disponemos, no seriamos capaces de construir semejante monumento, siendo la Gran Pirámide todavía un desafío para nuestra soberbia civilización y puede ser una puerta hacia nuestro verdadero pasado.
Aquí pongo la parte del documental que se emitió en el programa "La otra realidad" dirigido por el mismo Dr. Jiménez del Oso. Otro documental imprescindible que posee una gran calidad e imágenes inéditas del interior de la Gran Pirámide. Disfrútenlo.








5 comentarios:

  1. Hace un par de años, tal vez uno más, estuve en Egipto, el día que "tocaba" la meseta de Giza, avisé al guía sobre mi separación del grupo. En la Gran Pirámide sólo pueden entrar 150 personas al día, yo quería llegar temprano, normalmente te llevan a la de Kefrén. Cuando estás a los pies de la Gran Pirámide algo te dice que aquella monstruosa construcción ha sido testigo de toda nuestra historia, tocas los gigantes sillares de la base, subir por ellos hasta la entrada es en si una auténtica experiencia. Cuando le das la entrada a uno de los guardianes del acceso, un túnel negro se encuentra frente a ti, es el momento de entrar y aunque llevas delante y atrás a otros turistas, todos sin excepción enmudecen al entrar, accedemos a un sitio sagrado. Aunque el calor y la humedad hacen que el aire sea difícilmente respirable. Discurres por un pasadizo ascendente que acaba en otro conducto cerrado al público (que lleva a la cámara de la reina) y te encuentras con unas escaleras que has de subir para seguir andando por una pasarela que asciende bajo la galería abovedada más impresionante que he visto en mi vida, todo encaja a la perfección, ni un pelo cabría entre las juntas de aquellas rocas. Al final llegas a la entrada de la cámara del rey, allí el calor es mayor y el ambiente está enrarecido, entras agachado y de repente, frente a ti se abre un gran espacio, absolutamente negro, oscurecido por el tiempo y las manos, a tu derecha un sarcófago herido, sin tapa, sin inscripción alguna, puedes tocarlo, meter la mano dentro, interrogarle. El comportamiento de la gente en aquella cámara es difícil de describir, algunos lloran, otros se abrazan por haber cumplido el sueño de sus vidas, otros tocan las paredes como si pudieran hablar con ellas. Mi sensación en aquella cámara fue la de entrar en una máquina, todo tiene auténtica pinta de máquina, las piedras están encajadas con auténtico primor, las gigantes losas sólo podrían moverlas otros gigantes.Estuve casi una hora en aquella sala, a mi me pareció 5 minutos. Si la Gran Pirámide es una máquina, la cámara del rey es el motor, eso está clarísimo. No se cómo se podrá poner en marcha, tal vez sea una gran máquina espiritual, tal vez sea una iniciadora energética, pero quien ha entrado a la Gran Pirámide no puede decir al salir que es la misma persona que entró. La gente salía de la pirámide comos si bajaran de un platillo volante que los hubiera abducido hacía siglos. Yo bajé mareado, con dos convencimientos, el primero es que el hombre fue capaz de construir algo increíble y el segundo es que el ser humano de hoy en día ha olvidado que el universo y nosotros somos la misma cosa. Imagino a Julio César o Napoleón durmiendo en aquel sarcófago y salir poderosos y destinados a cambiar el mundo.

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  2. Muy interesante lo que cuentas, Lázaro. Lo que está claro es que sea lo que sea, la Gran Pirámide es algo extraordinario y único. Es el misterio hecho piedra. Ojalá que pronto tenga yo la oportunidad de visitar la Gran Pirámide. Muchas gracias.

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  3. Jose, sabes que Bauval está preparando un tour a las pirámides egipcias, para dentro de un par de meses... Tal vez tengamos que organizar uno al estilo de Jaén...

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  4. Por favor, avisadme para ese tour. Debo reconocer que estoy cambiando de opinión sobre muchas cosas; hace pocos años, uno me dijo que no se creía la versión oficial sobre la edad de las pirámides y yo reaccioné como los arqueólogos ortodoxos y casi le ridiculicé, eso me hace pensar en la frase de Jiménez del Oso en la primera parte del documental, cuando dice algo así como "los sabios las explican diciendo lo que saben pero sin saber lo que dicen". Empezando porque ni tan siquiera llaman a las cosas por su nombre, pues la cámara de la reina no era en absoluto la cámara de ninguna reina, estamos totalmente desorientados con la historia, no sabemos nada y al final, los que más intuición tienen, son los que están más cerca de dar en el clavo que los que estudiaron para ello; sirva de ejemplo arqueólogos que han currado siempre con una cuadrilla de albañiles para hacer el trabajo sucio de la excavación, resulta que esos albañiles sin conocimiento alguno sobre arqueología, les orientan a ellos muchas veces advirtiéndoles de en qué sentido excavar y cómo va un muro, y mira por donde aciertan más que el arqueólogo, esos albañiles no tienen ni idea de la ciencia arqueológica pero no les falla el olfato en otros menesteres. Si hoy día, sabiendo como sabemos hacer tantos efectos especiales para el cine, no sabemos cómo demonios construir pirámides como esas, perdonad, pero la especie humana en vez de evolucionar desevoluciona. Hay un conocimiento que hemos perdido, no sé cuándo ni cómo. La santísima trinidad es una memez comparada con este misterio. Pido perdón de nuevo por si alguien se ofende o no entiende mis palabras, pero no creo en dios, creo en las pirámides.
    Soy, Loli, publico mi comentario como anónimo porque me da problemas el sistema y no me deja.

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  5. Lázaro, sé por el facebook que Bauval está preparando un tour por la pirámides, pero solo por encima. Organizar uno solo es cuestión que lo decidamos y lo hablemos.
    Loli, pues sí, en la historia hay agujeros por todos lados, y aunque no lo quieran admitir los ortodoxos hay muchos indicios de que un alto conocimiento se ha ido transmitiendo a lo largo de los milenios desde hace no se sabe cuándo, aunque también hay indicios para pensar que como poco desde hace unos 12.000 años.
    Decir que la Trinidad es una memez comparada con las pirámides jejeje, bueno, se te comprende, pero ten en cuenta que los que levantaron ese gran monumento sí creian en Dios, y, viendo la tradición hermética y gnóstica heredera de ellos, con una mentalidad y conceptos más elevados que nosotros. Saludos.

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